¿De quién fue Hirohito Hironomiya?
¿Valió la pena morir?

¿Fue una marioneta de los imperialistas,
o la punta de una espada hambrienta?

Un Dios por una vez para sesenta millones,
rodeado por tanques, aviones de guerra Mitsubishi,
y crisantemos de oro –

Ahora no es mas que una pequeña vasija
de ceniza en un sepulcro de gran tamaño –

Es extraño cómo ese pequeño amante de Mickey Mouse
se las arregló para conquistar
una buena parte del mundo durante casi mil días.