Una reflexión tanatológica

Huevo de oro - Una manipulación gráfica de T Newfields
Tara: (contemplando un cuadro de una calavera, con una leve sonrisa en los labios) Esta imagen es perfecta para meditar.
José: (sacudiendo la cabeza con desdén) No, es solo una distracción. Ninguna imagen es realmente adecuada para la meditación. Meditar es el proceso de ir más allá de todo pensamiento e imagen. En la verdadera quietud no hay imágenes ni sonidos.
Raúl: Eso suena como dormir. ¿Cuál sería la diferencia?
José: (volteándose hacia Raúl, con voz baja e intensa) Tienes que meditar para entenderlo. No meditamos para quedarnos dormidos, sino para despertar. Sólo contempla lo que resta cuando todo el ruido y todas las imágenes han desaparecido.